Satirica

¿Quién no ha deseado cometer un crimen alguna vez, ya sea robar en el Carrefour o atropellar a una expareja, pero se ha dado cuenta de que al ser pobre no se puede permitir un abogado ni los gastos del juicio? Los ricos son como la gente normal, solo que un poco mejores, entonces pueden ir por la vida con el papo fuera, haciendo lo que les dé la puta gana. Drogas, alcohol, violencia…, eso es lo que realmente me apetece cada lunes por la mañana, pero en vez de eso tengo que mirar fijamente una pantalla mientras tecleo letras al azar durante ocho horas. Afortunadamente, la mayoría de las personas adineradas tienen también una presencia pública, por lo que, aunque el castigo de sus actos delictivos no les importe un rábano, sus consecuencias mediáticas pueden llegar a perjudicar su imagen. 

Sin vicio no puedo estar

Si tienes pasta y por consiguiente, tiempo, es normal que te acabes dando a algunos vicios, lo contrario sería una estupidez. Esto lo puedes llevar con mejor o peor elegancia y, con suerte, pasar por la vida sin demasiados problemas médicos o legales. Dos o tres internamientos voluntarios en centros de desintoxicación y unas cuantas horas de servicios comunitarios y listo, nadie se va a acordar de aquella vieja que atropellaste estando más cocido que el culo de un taxista.

El problema es que hay una correlación bastante marcada entre hacerse rico y ser un puto psicópata, por lo que se dan casos en los que las adicciones ya no son simpáticas excentricidades como tomarse una botella de pacharán al día o esnifar hasta el gotelé de las paredes, sino cosas mucho más oscuras y perversas. Por esta razón, vamos a centrarnos en delitos menores cometidos por figuras dedicadas al mundo del espectáculo y dejar los perfiles más siniestros para otra ocasión. 

Dicho esto, los artistas son personas a las que se les presupone un carisma y unas dotes de comunicación excelentes, por lo que dar una justificación convincente de sus actos no debería ser un problema. Juzguen ustedes mismos.

¡Pío! ¡Pío! ¡Que yo no he sido!

1 - PARIS HILTON - Ni un gramo de tonta

Según la Wikipedia, Paris Hilton es una personalidad mediática, empresaria, miembro de la alta sociedad, modelo, cantante, DJ, actriz y cofundadora del partido político Más Madrid. También es heredera del emporio Hilton, por lo que siempre ha tenido una solvencia económica que le ha permitido ir de forma un poco imprudente por la vida; lo que, desde este espacio, aplaudimos y celebramos.

El caso es que la joven París, en el pico de su popularidad, fue pillada con lo que viene siendo un poco más de medio pollo de farlopa en el bolso. Parece que estaba siguiendo la dieta de Perico Delgado. 

Su excusa fue bastante imaginativa, aunque poco convincente. Primero declaró no haberse percatado de la bolsita con polvo blanco, pero que, a simple vista, le parecía un chicle. Luego aseguró que el bolso no era suyo, sino de una amiga, arguyendo básicamente que esa marca era demasiado barata para ceñirse a sus estándares de moda. Finalmente, admitió sorprendida que el resto de objetos contenidos en el bolso, entre los  cuales se encontraban medicamentos para el asma, papel de fumar y 1,300 dólares en efectivo y varias tarjetas de crédito, sí que eran suyos. La casualidad. 

Por una vez, lo que pasó en Las Vegas, no se quedó en Las Vegas, demostrando por enésima vez que Palencia es mejor, porque nunca nadie se entera de lo que allí pasa.

2 - WINONA RYDER - Menuda película

En 2001, la señora Ryder fue detenida y llevada a juicio por robar cuatro trapitos en una tienda de Beverly Hills por un valor de casi 6000 dólares. Tuvo suerte de haber cometido sus fechorías en una tienda de lujo, porque si hubiera sustraído ropa por esa cuantía en el Primark, tendría que haber contratado a una empresa de mudanzas. 

Pero lo mejor de todo este divertido enredo, fue la excusa que la actriz puso al ser pillada. Según ella, todo había sido un malentendido, ya que, en realidad, estaba investigando para un papel y el director le había pedido que robara en una tienda para meterse a fondo en el personaje.

La película iba a ser claramente autobiográfica, meta-cine, un ciclo infinito en el que solo hay una escena en la que Winona, interpretándose a sí misma, desvalija una y otra vez en la misma tienda, hasta que, en un giro final de los acontecimientos, aprendemos que había sido asesinada por el segurata la primera vez que había intentado escaparse y a partir de ahí su personaje era un fantasma; pero todo eso da igual, porque al final todo había sido un sueño de Resines tras matar a Leonardo DiCaprio en el tercer nivel de sueño, al descubrir su relación sentimental con Teté. ¡Chúpate esa, Nolan! 

Seis años después del incidente, Winona declaró no sentirse culpable por haber robado, ya que no había dañado a nadie. Al año siguiente la actriz hizo un cameo en la serie de TVE1 “Ana y los 7” donde interpretaba el papel de una okupa que se colaba en casa de los Hidalgo y acababa haciéndose amiga de Ana Obregón. Curiosamente, la escena termina con el personaje citando a Proudhon: «La propiedad es un robo», justo antes de prenderle fuego a una cortina. 

3 - EDDIE MURPHY - Putero o altruista

Esta historia tiene los ingredientes perfectos, un comediante taciturno y una transexual de origen samoano, que, sin duda, son los mejores; pero sobre todo, tiene un olor muy fuerte a puritanismo americano.

En 1997, el cómico, actor, cantante y filántropo nocturno Eddie Murphy, era una de las caras más famosas de Hollywood, habiendo dado el paso del show televisivo SNL a la gran pantalla. El actor llevaba además cuatro años casado, lo que nos importa una mierda, pero, al parecer, es relevante para esta historia. 

El caso es que un día, a las cinco menos cuarto de la mañana, la policía detuvo su automóvil en el bulevar de Santa Mónica, una de las arterias principales de Western Hollywood, descubriendo con estupefacción que iba acompañado de una conocida prostituta transexual. La prostitución es ilegal en la gran mayoría de los Estados, pero los agentes confirmación que no se estaba llevando a cabo ningún tipo de intercambio sexual y que las dos personas viajaban en el coche disfrutando de la suave brisa del alba, viendo como el rocío de la aurora hacía brillar las hojas de las palmeras. Eso sí, a la pobre mujer, conocida como Shalimar, sí que la detuvieron por tener orden de arresto por prostitución pendiente. 

La excusa del actor fue que se paró a ayudarla sin saber quién era. Según Eddie, ese fin de semana su familia estaba fuera y como tenía problemas para conciliar el sueño, salió a dar una vuelta, comprar unas revistas y ver cómo estaba el panorama. Ahí fue cuando se encontró con la mujer y le pareció que quizás estaba en problemas, por lo que se ofreció a llevarla a casa. Hasta ahí todo bien.

Para no entrar en jardines demasiado densos, vamos a decir que desde este humilde blog, desearíamos que nadie tuviera que recurrir a la prostitución para ganarse la vida y mucho menos hacerlo bajo amenaza o coacción. Dicho esto, la reiteración de los medios en que el lugar era un conocido punto de prostitución homosexual, el constante recordatorio de que el Señor Murphy estaba casado y la insistencia del actor en mostrarse como un ejemplar padre de familia, que además de ser una celebridad carismática, va por ahí ayudando a personas en apuros, suena sospechoso.

En una entrevista posterior a la revista People, Eddie ofreció otras excusas, aunque, por otro lado, nadie se las había pedido. Aseguró que durante años, poco menos que, patrulló las noches de Nueva York dando dinero a los vagabundos y a las prostitutas de forma desinteresada para que abandonaran la calle. 

Todavía no entendemos cuál es el problema en que un adulto quiera salir en mitad de la noche a chupar unos culos, o lo que sea, mientras no incurra en ningún delito (mejor aún si fuera sin recurrir a la prostitución). Si luego tiene que dar alguna explicación, que lo solucione en su casa, pero que no venga a contarnos cuentos chinos. Ya se sabe que “Excusatio non petita…”, te comiste una pollita. 

4 - GEORGE MICHAEL - Nadie al volante

Nacido con el nombre Georgios Kyriacos Panayiotou (nos apetecía decirlo), el famoso artista inglés rellenó durante su vida un historial de accidentes de tráfico de lo más variado, incluyendo desde alunizajes a saltos de un automóvil en marcha en medio de la autopista. Pese a lo aparatoso de muchos de ellos, el cantante no sufrió ni causó daños graves en ninguna de las ocasiones, lo que debería llenar de esperanza a cualquier persona que guste de mezclar cannabis con somníferos antes de conducir. ¡Sí se puede!

Solo en 2006, George tuvo tres incidentes relacionados con la conducción (y la matuja). En uno de ellos, el que nos ocupa en este artículo, se estrelló contra varios vehículos estacionados causando un buen destrozo. La excusa dada por la estrella del pop fue que, simplemente, era un “conductor terrible”. El cantante intentó afianzar esta hipótesis asegurando que en el pueblo lo llamaban “el Baquelita” por ser tan mal conductor. 

Para corroborar que aquello no era solamente un subterfugio y que de verdad era un mal conductor, George se vio obligado a seguir teniendo accidentes de forma regular, llevando su coartada hasta las últimas consecuencias. En 2010 se estrelló contra una tienda de fotografía donde, casualidades del destino, pretendía hacerse una foto para renovar el carnet; cosa que no pudo hacer hasta pasados cinco años, ya que le retiraron el permiso durante ese periodo. Al menos, pudo usar las instantáneas para decorar su celda durante las ocho semanas que estuvo en la cárcel.

5 - METHOD MAN - Inhalación de la renta

Method Man, miembro del grupo de rap Wu-Tang Clan, y amigo íntimo de Isabel Pantoja, estuvo recibiendo cartas del IRS (Hacienda, en Estados Unidos) de forma regular desde 2002 para que pagara los impuestos que le correspondían. Para 2009, ya había acumulado una deuda de más de 52.000 dólares y los de la Agencia Tributaria tenían los huevos tan hinchados que decidieron ir a hacerle una visita. Lo primero que hicieron fue embargar su coche, un Lincoln Navigator, no por lo del dinero, sino por hortera. 

Pero lo que no importa aquí, es la excusa que esgrimió el rapero para no haber pagado, así que agarraos los machos, porque es oro puro. Al parecer, nunca llegó a abonar lo que debía porque había estado demasiado fumado. Hablamos de un periodo de siete años. El artista declaró tener dinero de sobra para pagar, pero aseguró que, lamentablemente, nunca había llegado a abrir esas cartas. Es más, reconoció no haber abierto ningún otro correo postal en ese periodo de tiempo y curiosamente, algunas misivas contenían cheques que nunca se habían llegado a cobrar. 

En una de las cartas abiertas años después, Method descubrió que su carnet de la biblioteca municipal había caducado en 2005. Según su círculo más próximo, de todas las cosas que le sucedieron ese día, esa fue la que le hizo llorar. Por suerte, hace tiempo que he olvidado ese episodio.

6 - CHARLIE SHEEN - Medio hombre y un destino

Es de sobra sabido que Charlie Sheen siempre ha sido un auténtico canallita, como el de Pantomima full, pero con dinero. Un hedonista adicto a la dopamina que quiere seguir pasándolo bien y cuya única medida concebible es el volquete. Por una parte, es admirable, pero no vamos a aventurarnos a decir que estamos en el equipo del Señor Sheen, ya que, como suele pasar con muchas personalidades ricas y famosas, lo mismo te da una de cal, que dos de arena. Siendo un poco más concretos, lo mismo participa en campañas benéficas y dona grandes cantidades a la ayuda contra el SIDA (enfermedad de la que es portador); como le da por medirle un poco el lomo a su mujer o es acusado de abusar de un niño actor. 

Además de una larga historia de adicciones, sobre todo al alcohol y la cocaína, constantes intentos de rehabilitación y recaídas, el actor es también un notable putero y tiene serios problemas para gestionar su ira. Uno de los episodios más celebrados de este señor, fue aquella vez que causó destrozos en una suite del Hotel Plaza de Nueva York por un valor de 7000 Dólares, bajo la atónita supervisión de una actriz porno. Ella misma declaró más tarde: «Nunca la había visto tan gorda». Por ese precio le podría haber prendido fuego a un par de hostales de mochileros en el Cabo de Gata y quedarse igual de a gusto, o incluso más.

El personal tuvo que llamar a la policía para informarles de que había un “individuo emocionalmente perturbado” en el hotel. Los agentes encontraron al actor desnudo y claramente intoxicado, o parafraseando el acta policial, «puesto hasta el culo de todo». Pero la mayor sorpresa se la llevaron cuando, según su agente, todo aquel estropicio había sido provocado por una reacción alérgica adversa a su medicación. Se le olvidó mencionar que aquella noche Charlie se había inhalado todos los Grammys que nunca le dieron y alguno más.

Curiosamente, esa reacción alérgica que te lleva a destrozar cosas, es la misma que sufrió el artista de variedades Ramoncín, cuando decidió versionar “Come As You Are” de Nirvana en directo. Si Kurt Cobain levantara la cabeza…, puede que Courtney Love acabara en la cárcel, pero ese es otro tema. 

7 - NICOLE RICHIE - La regla de tres

Celebrity, diseñadora de moda, miembro de la alta sociedad, actriz y amiga de Paris Hilton, Nicole tenía todas las papeletas para salir en esta lista. 

En diciembre de 2006, varios conductores alertaron a las autoridades de que un Mercedes negro circulaba en dirección contraria por una autopista del sur de California. Las sospechas se dirigieron inmediatamente hacia célebres infractores viales, como George Michael o Farruquito, pero el comando se dio cuenta, con acierto, que todavía era demasiado pronto para que ninguno de los dos estuviera despierto y sembrando el terror por las carreteras. 

Por el contrario, cuando dos patrullas móviles interceptaron el vehículo, encontraron a una despreocupada Nicole Richie hablando por el móvil y completamente ajena al alboroto que se estaba montando fuera del habitáculo. En este punto hay que aplaudir el trabajo de los ingenieros de Mercedes a la hora de insonorizar el coche. 

La joven celebridad les dijo que estaba intentando seguir a una amiga, pero le perdió la pista, en un perfecto símil con la situación que las dos neuronas activas, en ese momento, estaban sufriendo en su cabeza. Finalmente, tuvo que admitir que tamaña confusión había sido causada por una mezcla de cannabis y Vicodin (no confundir con la mascota de del municipio de Vic, en la provincia de Barcelona, del mismo nombre). Según la acusada, había tomado esta medicación para aliviar los dolores menstruales y la combinación con la marihuana no había sido más que un timing desafortunado. 

Para ser justos, el Vicodin, que tiene efectos narcóticos, sí que es un medicamento útil para contrarrestar los dolores menstruales extremos, pero solo es posible acceder a él con una prescripción médica, cosa que nuestra protagonista no tenía. 

El Sheriff encargado de la investigación, Ali Aden, no se creyó la historia desde el principio, según él mismo declaró a los medios: «Cuando escuché la explicación de la señora Richie, lo primero que hice fue consultar el calendario lunar. Pocos hombres lo saben, pero yo estoy deconstruido y sé que la menstruación siempre coincide con la luna llena. Más de una vez me he tenido que ir de casa en esas fechas, porque mi parienta se pone loca como una cabra y me da miedo».

La actriz fue sentenciada a 96 horas de cárcel, pero solo cumplió 82 minutos, superando así el récord de Lindsay Lohan por dos minutos. Esto es estrictamente verdad.

La culpa fue del Chachachá

Como habéis podido comprobar, echar balones fuera no es solamente una categoría de Pornhub, sino también un arte que muchos famosos han llevado hasta la perfección. O el esperpento, según se mire. Reconocer los errores es algo muy loable, pero sacarse de la manga una historia inverosímil para justificar una situación ya de por sí rocambolesca, también tiene su aquel. Justificarse en adicciones parece ser el recurso más manido, pero ya que vas a mentir, se agradecen digresiones surrealistas, incluyendo cuantos más detalles escabrosos mejor. Llegados a este punto, debemos recordar esa frase de la sabiduría popular que siempre nos repetían nuestros abuelos: «aunque haya sido el dragón el que te ha ofrecido el tripi, la culpa del accidente sigue siendo tuya».